Nos equivocamos de papel, amada
debí ser yo quien me quedara
debiste
ser tú la intérprete
debí
ser yo quien descendiera
sin tú irme a
buscar
mi
error no fue tanto el voltear a verte
la historia nos engañó una
vez más
mi error fue haber sido el que tocaba estos arpegios
ser
aquel siervo que del tiempo conmovió a su hijo
si
es que por mí fuera, cambiaríamos de papeles
quedarme entre las aguas negras
ser yo canción de los
muertos
ser
tu quien tenga un futuro
un
doctorado, una familia
ser yo quien arrastre estas
culpas
que su peso te hicieron
llegar al fondo
amada
mía, nacimos en los lugares inversos
siendo almas
gemelas en tiempos equívocos
y bajo esas circunstancias,
las peripecias se burlan de la vida
pero
este es el sentido de la vida, la burla
y nosotros soportar
tanto hasta casi romper un soporte
ser siameses
divididos por la muerte
enganchados por el comienzo
mutilados
por la ironía del proceso
por las risas de esta
existencia turbulenta.
Te daría mi instrumento
musical para emprender tu ascenso
yo vagaría
en mi soledad
qué
más da, si no difiere mucho de tu ausencia
si no cambiamos de
papel al nacer
lo haremos al morir/ lo
haremos al morir/ lo haremos al partir.
Crece
y sigue aprendiendo sobre el difícil sendero de la humildad
camina por las
selvas, los bosques y mete tus pies a los mares
tus manos al sol y humecta de luz tus enseñanzas
te va a traer un buen giro
el destino a cambio
olvida
esta tierra de tanto olvido y de luto, como si no hubiera pasado
como al olvidar se
sueltan los pasados de esta tierra
Si por mi fuera, cambiemos
de papel
yo
navegaría bajo los mapas incrustado en el destierro
sin instrumento y sin
ti, cantándole al rey de los muertos
tomaría entonando mi voz cada
media noche el expreso a un gris firmamento
y tú
en algún día de tu vida realizada, en el horizonte escucharías
el eco de mi canto
como un recuerdo diluido.